¡LLAMADA DE SOCORRO A LOS QUE PUEDEN HACER ALGO!

El delegado de la Junta de Castilla y León en Zamora en unas declaraciones en televisión, ha confirmado que existen a día de hoy más de 40 solicitudes para instalar plantas de biogás en nuestra provincia, aunque añade que no todas serán autorizadas…

No tenemos palabras para expresar lo que sentimos al comprobar que se proponen seguir adelante con un plan de exterminio provincial semejante. 

Una sola planta de biogás como la de El Cubo del Vino implica extender en lugares que nadie especifica 200.000 toneladas de digestato al año (no, no es compost inodoro, es un subproducto casi líquido y maloliente), implica recibir 200.000 toneladas de residuos en su mayor parte purín y desechos animales incluyendo cadáveres de animales enfermos (no, no es como las plantas visitadas en Alemania que gestionan una mayoría de residuos vegetales), implica la construcción de más macrogranjas y atraer residuos industriales de otras zonas (sí, podrán hacerlo aunque de palabra ahora lo nieguen), implica dejar sin recursos y arruinar a los ganaderos de la zona (no, no van a ser beneficiados porque recojan sus residuos, en poco tiempo va a ser lo contrario), implica arruinar a los negocios de hostelería y alojamiento (sí, los va a invadir el repugnante olor del digestato aunque no tengan una planta cerca) implica emitir sustancias muy tóxicas al aire que provocan enfermedades respiratorias y cáncer (no, las chimeneas de estas plantas no son para emisiones sólo ocasionales) e implica contaminar el acuífero de manera continua, prolongada e irreversible.

Éso implica… ¡una sola planta!

¿Podemos imaginar los efectos de 5? ¿O de 10, o de 20 o de más de 30 plantas de biogás?

¿Por qué los que tienen que autorizar las plantas no ven en esos proyectos los datos que nosotros sí vemos? 

Queremos una vez más convocar a los sindicatos, pedirles que nos escuchen, recordarles que somos su gente, que en esta provincia hay muchas personas sobradamente preparadas que están estudiando este tema, que nos informan y que nos alertan, que tenemos datos ciertos de lo que esta industria representa.

Queremos dirigirnos a nuestras mancomunidades, a las que ya hemos solicitado por carta ser recibidas, para que lo hagan con urgencia antes de que sea demasiado tarde.

A nuestra Diputación, a quién pedimos que nos reciba y nos permita transmitirle toda la información que conocemos, rogándole también que nos defienda, que se ponga del lado de los vecinos de la provincia a la que representa.

A todos ellos, a los que han recibido y escuchado a empresas del biogás de fuera que ofrecen promesas distintas a lo que aparece en sus proyectos.

¿Qué temen de nosotros? ¿Por qué rechazan escucharnos? 

No tenemos más armas que información verdadera.